El tapering del BCE que reducirá sus QE, es decir su programa de estímulos monetarios. Todo comenzará con un recorte en la cantidad de bonos soberanos adquiridos de 60.000 a 30.000 millones € hasta finales de septiembre de 2018.
Es importante destacar todas las características del anuncio. En primer lugar, el anuncio incluye esta advertencia, “si el entorno se vuelve menos favorable, o las condiciones financieras se vuelven incoherentes en relación con un mayor progreso hacia un ajuste sostenido en la trayectoria de la inflación, entonces el Consejo de Gobierno estará listo para incrementar el programa de adquisición de activos en términos de tamaño y/o duración”.
Así y siguiendo al precedente de la Fed, el Eurosistema reinvertirá el fondo de los bonos de su balance cuando estos lleguen a vencimiento, “durante un periodo de tiempo extenso después del final de sus compras de activos y, en cualquier caso, durante tanto tiempo como sea necesario”. Además, no se tocan ni los tipos de interés ni las principales operaciones de refinanciación incluyendo las rondas de liquidez a tres meses para la banca) "
Ese comunicado ha tenido reacciones inmediatas por los mercados: las principales referencias de deuda soberana de la eurozona ha experimentado un rally, mientras que el euro ha visto un fuerte movimiento a la baja en su cruce contra el dólar.
“La eurozona continúa dependiendo de la muleta del QE, y esto no cambiará en ningún momento del futuro próximo, dada la fragilidad de la presión inflacionaria y la cautela del banco central para desbaratar el crecimiento naciente de los precios” , según Martin Arnold, analista de ETF Securities, que prevee una baja del euro.
Dicho comunicado coincidía con la previsión del mercado, que esperaba que las compras mensuales de bonos se redujeran a la mitad y que el programa de estímulos se ampliase durante nueve meses. Cabe destacar que el discurso de Mario Draghi ha sido ha sido bastante optimista, destacando el buen momento de crecimiento que está experimentando la eurozona. “El reajuste de las compras de activos refleja la creciente confianza en la convergencia gradual de la tasa de inflación hacia nuestro objetivo” , dijo Draghi.
Además, se destacó que el riesgo de la baja del euro no esta en la propia eurozona, sino que procede del exterior (particularmente a través del tipo de cambio), y que justifica la decisión de mantener los estímulos precisamente para sostener estas condiciones favorables y así avanzar en el objetivo de conseguir que la inflación se quede en el 2% o ligeramente por debajo en la eurozona.
“Este escenario permite al BCE seguir actuando durante más tiempo y contribuye a alejar una posible primera subida de tipos hasta 2019”, afirma David Simner , gestor de Fidelity International.
Para Simner,concluye que las herramientas de política monetaria no convencionales han cumplido en gran medida con su cometido y ya no son necesarias. Su recomendación es que “los inversores tendrán que moverse con cautela ahora que los mercados entran en una nueva fase caracterizada por un apoyo de los bancos centrales menor del que nos han tenido acostumbrados durante la última década.
François Raynaud, considera que la decisión de que BCE reducirá sus QE perpetúa el escenario “lower for longer”, al mantener los estímulos – aunque sea en menor cuantía- durante un periodo de tiempo superior al esperado inicialmente. Raynaud aconseja que la reacción de los mercados sea limitada.
Tobias Schafföner, analista sénior de Flossbach von Storch, comenta que esta reducción parece ser “una solución pragmática para ganar tiempo”. No obstante, advierte que la única pieza que no termina de encajar en los planes del BCE es la fortaleza del euro: “Un euro fuerte importa deflación en la eurozona y aleja la inflación actual del nivel objetivo del 2% definido por el banco central para proteger la estabilidad de precios. Por ello, cuando el tipo de cambio conduce a la deflación, es necesario que el banco central tome cartas en el asunto”, explica.
En GEF. Gestión de Finanzas, seguimos de cerca las decisiones tomadas por el Banco Central Europeo y su repercusión en los mercados financieros.
Fuente: http://es.fundspeople.com/news/el-bce-empezara-a-reducir-su-qe-en-2018