La volatilidad en los mercados es indisoluble de las pasiones humanas, e influye en la psicología de masas que también computa en los precios de acciones en los mercados. Con ella llegó la sensación de riesgo, la emoción, las situaciones límite, el seguimiento compulsivo y...también trajo que algunos inversores caigan en una ludopatía bursátil donde las apuestas llevan nombre de compañías cotizadas.
Realmente ningún activo es ajeno a este tipo de dinámicas, en las que hay personas más y menos propensas. Pero tras la fiebre de las cripto-activos que parece que parece estar ya remitiendo (por el momento), afloran ahora nuevas formas de esta particular adicción en las clínicas especializadas. Sí, las características particulares del trading con cripto-monedas se prestan de manera especial a acabar apostando lo que no se debe a un token cuan caballo en el hipódromo.
La línea roja que divide la inversión de las apuestas es muchas veces indistinguible
El capitalismo popular brindó a los pequeños accionistas las posibilidades reservadas hasta entonces sólo a los grandes capitales, no sin la debida dosis de "dirigismo" de un dinero en masa que pueda hacer ricos y puede desencadenar crisis. Los mercados llegaron teóricamente para aportar liquidez y transparencia a unas cotizaciones e empresas además podían financiarse con mecanismos como las OPVs o emitiendo nuevos títulos.
Pero hay muchos más trasfondo del que parece en este temas y su relación con la inversión y los mercados. Al fin y al cabo, dicho crudamente, ¿No es cualquier inversión en última instancia nada más que una simple apuesta? Por mucho que lo pongamos de largo, por mucho que lo adornemos, por mucho que intentemos disfrazarlo, incluso para los inversores más pragmáticos y sistemáticos, adivinar el futuro es imposible y arriesgando su dinero a una posibilidad futura, la respuesta no es otra más que los inversores apuestan.
Si hay riesgo a futuro, se trata de una apuesta; y siempre hay riesgo, puesto que una máxima inquebrantable del mercado es que sin riesgo no hay beneficio. Puede apostar a corto, a medio o a largo plazo, pueden apostar racional o compulsivamente, pueden usar indicadores o basarse en corazonadas... lo que sea, pero la unión de azar y dinero, cuando es enfermiza, tiene un nombre definido fidedignamente por la Real Academia de la Lengua; "adicción patológica a los juegos electrónicos o de azar".
Leer más: Fuente: https://www.elblogsalmon.com/mercados-financieros/cripto-adiccion-cuando-burbuja-no-era-unico-riesgo-que-acechaba-cripto